Entender las emociones para poder cuidar nuestros estados internos
¿Verdad que te pones una tirita cuando te haces un corte? ¿Verdad que te tomas antibióticos para tratar una infección? De hecho si alguien se hace daño o sufre un accidente también le practicamos los primeros auxilios.
¿Y por qué no hacemos lo mismo cuando sufrimos daño emocional? Cuando sufrimos algún tipo de “heridita emocional” esperamos que se cure sola, sin necesidad de ninguna ayuda extra o “tirita emocional”. Se espera que simplemente nos recuperemos, que se nos pase y listos, cuando todos, toooooodos, sabemos lo que duele el rechazo, lo que pesa la culpa o lo duro que es fracasar.
Las heridas emocionales pueden ser tan reales como las físicas. Por eso en este taller queremos enseñaros a identificar, entender y crear estrategias de gestión para cuidar de nuestros estados emocionales.