¿Dismenorrea? Basta de reglas dolorosas

¿Dismenorrea? Basta de reglas dolorosas

Las reglas dolorosas o dismenorrea son algo muy común en nuestra sociedad, de hecho muchísimas mujeres tienen dolor durante la regla. Estas mujeres se sienten condenadas a sufrir cada mes de su vida, con la única opción de hormonarse hasta la menopausia, cuando se retira la menstruación.

Dismenorrea ¿qué es?

En el diccionario médico, la dismenorrea se define como: irregularidad de la función menstrual, especialmente difícil y dolorosa*. La dismenorrea se clasifica en primaria y secundaria.

  • La dismenorrea primaria aparece después de la primera regla y es debida a causas no relacionadas con la pelvis, como al exceso de una substancia similar a las hormonas  llamada prostaglandina, una substancia que su exceso causa contracciones uterinas dolorosas.
  • La dismenorrea secundaria, la más corriente, puede empezar después de años de la primera regla, y su causa son los dolores relacionados con factores de la misma pelvis, como: trastornos de los elementos de sostén (articulaciones, anclajes, fascias, ligamentos…), trastornos del útero y de sus paredes (patologías como la endometriosis, fibrosis, procesos inflamatorios locales, infecciones, miomas, pólipos…).

Pero no siempre el dolor menstrual es por estas causas, debe hacerse un diagnóstico diferencial, pues puede ser causado por quistes o torsiones ováricas, embarazos ectópicos, infecciones de las vías urinarias… y derivar al especialista adecuado en cada caso.

 


utero osteo9

El tratamiento en osteopatía ginecológica, tanto para la dismenorrea primaria como la secundaria, es el mismo, con su especificidad en cada caso. Primero, hacemos un interrogatorio para hacer un buen diagnóstico y después, a través de la manipulación y de ajustes específicos, resolvemos desajustes de las articulaciones de la pelvis y el conjunto lumbosacro. También trabajamos las partes blandas: fascias, ligamentos y órganos, accediendo a ellas a través del abdomen y por vía vaginal o rectal. Utilizamos técnicas de escucha, desenrollamiento tisular y técnicas específicas para cada tipo de tejido, sea un órgano y/o  tejido de anclaje (fascia, ligamento…). Así resolvemos zonas de fibrosis, adherencias, congestiones locales, posiciones anómalas de los órganos intrapélvicos, cadenas lesionales que empiezan en esta zona y se traducen con dolor en otras zonas del cuerpo. Todo con las mínimas molestias, y muchas veces, con resultados casi inmediatos.

La regla dolorosa puede ir acompañada también de otros signos como vómitos, náuseas, cansancio, dolor lumbar y abdominal, espasmos, mareos… También puede ir precedida por el Síndrome Premenstrual, el cual empieza después de la ovulación hasta la menstruación. Este síndrome puede causar hinchazón abdominal, molestias en las mamas, irritabilidad, cefaleas, alteraciones del sueño, piernas hinchadas, falta de concentración, aumento de peso… y aún no se ha determinado una causa para todos estos signos, aunque algunos de ellos se podrían adjudicar a alteraciones hormonales. Lo que sí se sabe es que todos ellos mejoran con la actividad aeróbica como nadar, ir en bici, la marcha (correr, no, pues puede aumentar el dolor debido a los impactos) y los estiramientos (ideales para distender, relajar y movilizar estructuras).

También son importantes los factores alimenticios. Por ejemplo, los alimentos refinados aumentan los niveles de azúcar en sangre, que favorecen la producción de sustancias químicas inflamatorias en todo el cuerpo, una de ellas: la prostaglandina!

Por tanto, sobretodo para mejorar el Síndrome Premenstrual, deberíamos eliminar alimentos blancos como: el azúcar y harinas blancas, ingerir los menos cereales posibles (2 raciones al día), eliminar de la dieta los lácteos, sobretodo helados, requesón y yogur. También productos refinados como la bollería industrial, la carne roja y la yema de huevo. Los días posteriores a la ovulación, se debería consumir una dieta rica en verduras, frutas frescas, pollo, pescado, legumbres y productos derivados de la soja.

Y no pienses que te ha tocado a tí, y que estás condenada de por vida, ni que todo esto es hereditario y que sólo puede tratarse con anticonceptivos orales. Nosotros te podemos ayudar y queremos hacerlo.

Consulta con nosotros y con tu ginecólogo/a, puede que conozca nuestro trabajo. Seguramente arreglaremos más cosas de las que te imaginas. Déjate tratar.

*Diccionario médico. Editorial Masson, 4º edición.  


Si estás interesado / a en este tratamiento, contacta con nosotros para reservar tu cita.


Autores
Clara Nebot - Fisioterapeuta y OsteópataFisioterapeuta y Osteópata

Clara Nebot

Fisioterapeuta y osteópata, experta en ginecología, suelo pélvico y columna. Años de experiencia y docencia en sus manos. La madre d’Osteo9.

    Si te ha gustado este artículo sobre dismenorrea, te invitamos a que lo compartas en tus redes sociales favoritas. ¡Lo agradecemos siempre!
    SHARE IT:

    Deja un comentario

    Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.